Buscando información me he encontrado con todo un movimiento en contra del EMR no ionizante... concretamente con los cascos bluetooth.
He estado leyendo y parece que si, efectivamente está clasificado como "posible cancerígeno", pero algunos organismos lo aclaran de la siguiente manera:
Para decirlo sin rodeos, la IARC considera que las ondas no ionizantes de su dispositivo Bluetooth son tan probables como una fuente de cáncer como lo es su crema de manos de aloe vera.
Por lo visto la potencia que tiene lo máximo que podría llegar a hacer es calentar.... ¿Es posible que la gente pueda tener algo así como "hipersensibilidad" al EMR y les resulte molesto el uso de cascos inalámbricos? ¿Te pasa o conoces algún caso? ¿Crees que es todo autosugestión?